martes, 5 de abril de 2011

La Percepción


La Percepción es el medio a través del cual a la vez: se crea la ilusión de lo que llamamos "realidad" y simultáneamente a esta "realidad" se le registra o se le busca en la memoria para poder asimilarse. La percepción es una con la memoria, cuando tenemos una experiencia nueva, en la memoria se registra lo que se percibe. Cuando se repite la misma experiencia varias veces, el modo en el que la percibimos cambia porque dejamos de asociarla con lo maravilloso de cualquier "primera impresión". Lo que pasa es que se teje un puente en nuestro cerebro que va de nuestras percepciones a los recuerdo, de ida y vuelta hasta el punto en que se fusionan las dos, hasta el punto en que olvidamos lo que tanto nos gustó la primera vez de X, éso es porque ya no hay percepción sino un mero recuerdo que se actualiza, empezamos a vivir dentro de un recuerdo, lo que da la sensación de ser "más real" por lo habituado de la mente. Cuando salimos de viaje por ejemplo, nos abrimos a percepciones nuevas y a veces llegamos a decir que las vacaciones fueron "irreales", así que al volver de ellas decimos que "vamos de vuelta a la realidad".
Lo único que hay es una conciencia que está situada en medio de este circo que montan la percepción y la memoria, ésa conciencia es UNA y está ubicada en cada cuerpo o ser que existe, infinitamente fragmentada y en infinitas formas. La conciencia no tiene límites, es la totalidad, va desde un átomo hasta el cosmos. Lo que llamamos "real" es al lugar en que convergen las múltiples formas de ésa única conciencia, donde choca tú percepción con la mía, donde te veo y me ves.
Todos los pensamientos tienen su origen en el juego de la conciencia con los recuerdos y las percepciones. Cuando imaginamos estamos haciendo uso de nuestros recuerdos, en los cuales están guardadas nuestras percepciones, imaginar es precisamente hacer uso de sus distintas posibilidades. Así como son de inseparables la percepción y la memoria lo son también el Creer del Crear. Alguien que dice no creer en algo es sencillamente porque no conoce nada al respecto, o porque elige no abrir su sistema de creencias hacia ése determinado camino. En el momento en que tomas lo desconocido y lo haces conocido lo vuelves "real", entonces no hay necesidad de creer, se ha creado aquello que creías. Imaginando es como creamos nuestro propio destino.
A propósito ¿qué es lo que Velázquez está pintando en Las Meninas: el cuadro que ves, las personas que se ven en el espejo o a ti que observas? lo que tu mente proyecta en ése lienzo que no puedes ver y del cual te sientes tan confiado en realidad no existe, es un paradigma de tu mente, un paradigma que no cuestionas. Todo lo que crees conocer es un paradigma, es el resultado de la mezcla de tus percepciones y tus memorias, de tus creencias... pero ésas creencias sobre lo que no existe son lo que posibilitan el nacimiento de algo nuevo. Lo que empieza por una creencia culmina en una creación. Cada cabeza es un mundo, tan válido como el que hay.

"Dios mira a través de tus ojos. Dios sólo sabe lo que tú sabes"-Ramtha.

Así que cada quien es dueño de su propia realidad, respetemos la realidad de otros y nuestra percepción de la vida será respetada y valorada. Todas las percepciones nos debemos unir bajo la única mirada que justifica y posibilita la existencia: el Amor.
Del Dios que vive en mí al Dios que vive en tí.
In Lak Ech.

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